Socios de CCM asisten a sobrevivientes de inundaciones en Corea del Norte
por Rachel Bergen, en la web de CCM
La web de CCM (mcc.org) recibe donaciones —que se pueden hacer con tarjeta de crédito o PayPal— para su obra solidaria en todo el mundo. Hay que indicar la cantidad a donar en dólares de EEUU o Canadá, sin embargo, de manera que hace falta informarse, aparte, del equivalente en una de esas monedas para la suma que uno quiera donar. |
Socios del Comité Central Menonita (CCM) en la República Popular Democrática de Corea (RPDC), conocida como Corea del Norte, están trabajando para traer auxilio a los cientos de miles de damnificados por inundaciones y desprendimientos de tierra en ese país aislado.
Entre el 28 de agosto y el 2 de septiembre, lluvias torrenciales provocadas por el tifón Lionrock golpearon la parte noreste de la RPDC, provocando inundaciones y corrimientos de tierra en seis condados de la provincia de Hamgyong. Según Naciones Unidas, 138 personas murieron, más de 100.000 perdieron su hogar y unas 600.000 personas están necesitadas de ayuda.
A mediados de los años 90, los ciudadanos de la RPDC sufrieron inundaciones graves que destruyeron la mies y grandes extensiones de tierra de labradío, lo cual provocó una hambruna generalizada. Desde entonces el azote regular de inundaciones ha prolongado el problema.
El año pasado, sin ir más lejos, CCM realizó nueve envíos de material a sus socios en la RPDC, con un total de 3.470 mantas, 4.686 equipos escolares, 118,5 toneladas de carne envasada, 2.124 equipos de higiene, 560 kg de jabón y 714 equipos de emergencia.
La presencia de agrupaciones asociadas en el país ha supuesto que cientos de personas pudieran recibir equipos de emergencia y alimentos poco después de producirse la inundación. Sin embargo la necesidad sigue siendo inmensa, en particular porque han llegado la época de heladas nocturnas regulares. Uno de los socios de CCM en la región, la ONG canadiense First Steps, visitó las regiones afectadas en la frontera entre la RPDC y China para evaluar los daños y entregar provisiones de emergencia.
En el condado de Yonsa, la abuela Bong-Suk Shin, de 65 años, y su nieto Kum-Hyok Kim, de 11, escarbaban en el barro que cubría las ruinas de su casa, buscando cualquier cosa que se pudiera aprovechar.
—Durante tres días todo esto se volvió un mar —contó.
Shin y Kim perdieron todas sus pertenencias personales; entre otras cosas, sus tinajas kimchi, empleadas para almacenar alimentos para el invierno. En ese condado hay 81 personas muertas o desaparecidas y de una población de aproximadamente 40.000 personas, 27.308 se han quedado sin techo.
Susan Ritchie, directora ejecutiva de First Steps, fue con el grupo que visitó la región. Se sorprendió ante la inmensidad de los daños.
—Cuando First Steps visitó la región en octubre, hicimos un viaje circular, viajando todo un día y casi toda una noche. No vimos más que devastación —informó— Había personas de todas las edades juntando piedras, que supongo que usarán para reconstruir. Los veo trabajando duro para tratar de recuperar sus vidas.
En septiembre otro socio de MCC en el país, la ONG estadounidense Christian Friends of Korea (CFK) distribuyó 500 equipos de emergencia y 110 equipos escolares enviados por CCM, como parte de su respuesta ante las inundaciones en los condados de Musan y Yonsa.
Además CCM, por medio de First Steps, comprará 6.060 metros cuadrados de tejado de chapa para la reconstrucción de guarderías, centros preescoalres y clínicas en Yonsa. Unos 4.200 niños se beneficiaron con este proyecto.
—Gracias a CCM, los niños en Yonsa tendrán un lugar seguro donde estudiar y jugar, donde estarán a resguardo del frío, lo que permitirá a sus familiares a centrarse en reconstruir la comunidad —dijo Ritchie—. Los pacientes podrán estar a refugio del frío cuando requieren atención médica.