Menonitas suizos y derechos humanos
Comunicado del Congreso Mundial Menonita
Bogotá, 9 enero — «En muchas partes del mundo el nacionalismo está en aumento —afirma Juerg Braeker, secretario general de la Konferenz der Mennoniten der Schweiz/Conférence mennonite suisse, la Iglesia Menonita de Suiza—. Los menonitas, debido a su visión sobre la relación entre la iglesia y el estado, deberían estar mejor equipados para advertir los peligros del nacionalismo».
El 18 de noviembre de 2017 la Iglesia Menonita de Suiza realizó un foro público con el fin de equipar a los asistentes para poder comprender mejor el complejo tema del cambio legislativo que se aproxima. Existe una propuesta para cancelar la referencia obligatoria a la Declaración Europea de los Derechos Humanos en la constitución suiza. Los opositores temen que el cambio debilite el compromiso con los derechos humanos.
El organizador del evento, Anabaptist Forum for Justice and Peace (Foro Anabautista por la Justicia y la Paz), un grupo de trabajo de la conferencia, invitó a oradores de las iglesias menonitas de Suiza, de la Iglesia Reformada y de la Iglesia Católica Romana, además de movimientos políticos que luchan en contra de esta iniciativa de autodeterminación. Los seis oradores cubrieron los aspectos históricos, éticos, teológicos y políticos de los derechos humanos.
Los oradores examinaron «la relación entre la fe cristiana y los Derechos Humanos como una base común para la orientación ética de toda la humanidad», según Braeker.
Asistieron unas 50 personas, la mitad de ellas por parte de las iglesias menonitas; los demás representaban otras organizaciones cristianas o políticas relevantes.
La teóloga y mediadora Dorothea Loosli dijo que los menonitas han sido cruciales en el desarrollo de los procesos de los derechos humanos. Su defensa de la libertad religiosa se remonta a un tratado sobre los derechos humanos redactado en 1647 por Richard Overton, que tenía conexiones con los menonitas Waterlander en los Países Bajos.
Pierre Buehler, profesor de ética de la Universidad de Zúrich, dijo que la importancia ética de los derechos es que no son escogidos o definidos sino inherentes al ser humano. La teología cristiana expresa esto como la consideración de que los seres humanos somos seres creados, definidos por Dios; entonces ninguna ideología de un grupo en particular puede limitar estos derechos de forma absoluta.
Los cristianos en Suiza que resisten el movimiento de autodeterminación nacional están preocupados de que no se reconoce «una trascendencia final [Dios], para la cual la vida está determinada en sus dimensiones políticas, legales y sociales; y que por consiguiente se establecen límites al rango de la autodeterminación humana».