Para el inicio de mi presentación he elegido un texto del evangelio que puede parecer inapropiado para esta ocasión, pero luego me explicaré:
Algunos estaban hablando del templo, de la belleza de sus piedras y de las ofrendas votivas que lo adornaban. Entonces Jesús dijo:
—Llegará un día en que no quedará piedra sobre piedra de todo eso que estáis viendo. ¡Todo será destruido!* (Lucas 21:5-6)
Hay otras citas en los Evangelios que hacen relación a Jesús y al Templo:
Pues os digo que aquí hay alguien mayor que el Templo.
Si hubierais entendido lo que significa aquello de: Yo no quiero que me ofrezcáis sacrificios, sino que seáis compasivos, no condenaríais a los inocentes. (Mateo 12:6)
Jesús les contestó: -Destruid este templo y en tres días yo lo levantaré de nuevo.
En este caso, Jesús se estaba refiriendo a sí mismo y mostrándose como alternativa al templo de piedra. (Juan 12:19)
A través de estos textos vemos que Jesús presentó una nueva forma de relación con Dios. No basada en la pertenencia a una raza, no unida a un lugar o templo, sino abierta a toda persona dispuesta a tomar su cruz y seguirle, tal como se nos muestra en el Evangelio.
Por eso Mateo 27: 40, nos cuenta cómo al morir Jesús el velo del templo se rasgó, quedó abierto un espacio que estaba reservado únicamente para el sacerdote pues ahora todos tenemos la opción de ser sacerdotes y acceder directamente a Dios.
Entonces, este edificio en que nos reunimos hoy no es un templo donde Dios habite de forma especial, es básicamente un recurso para vivir y ofrecer esa alternativa de Jesús, es un edificio sagrado únicamente si los que lo habitan son santos.
Desde luego, para nosotros es un edificio de gran calidad teniendo en cuenta que hace poco más de tres décadas nos reuníamos algunos en una antigua cuadra en Quintanadueñas, otros en un garaje en la Calle Anselmo Salvá y luego hemos ido pasando por diferentes bajos y lugares extraños tales como el anexo a una funeraria en la calle San Francisco.
El mencionar nuestro pasado reciente, me da pie para entrar un momento en nuestra historia evangélica:
En España los términos “evangélico” y “protestante” se usan indistintamente. Aunque muchas iglesias evangélicas tienen sus raíces en la reforma del siglo XVI, la verdad es que en general los evangélicos nos sentimos herederos del cristianismo del primer siglo y en concreto nosotros, nos identificamos con muchos otros movimientos que a lo largo de la historia han encontrado su inspiración en el Evangelio de Jesús.
Por ejemplo y brevemente:
Aquellos que en el siglo IV, se retiraron al desierto al no estar de acuerdo con que por orden del Emperador Constantino el cristianismo pasase a ser la religión oficial y entrase en una relación malsana con el poder civil.
Francisco de Asís que en el siglo XII renunció a sus riquezas y se dedicó a predicar el Evangelio a los pobres, en términos sencillos y de honda identificación con los padecimientos de los campesinos.
Los ingleses del siglo XV que leyeron la traducción al Nuevo Testamento que hizo John Wycliff y eso transformó sus vidas.
Ya que menciono la traducción del Nuevo Testamento al inglés, no puedo pasar por alto uno de nuestros más queridos referentes del siglo XVI: El burgalés Francisco de Enzinas y su hermano Jaime. De familia Noble, estudiaron en la universidad de Alcalá de Henares y posteriormente en Lovaina donde conocieron los escritos de los reformadores alemanes. Jaime tras pasar por París, Amberes y Roma (mal lugar para un protestante en el siglo XVI), murió ejecutado en el 1546.
Francisco continuó en Lovaina hasta que se trasladó a Wittenberg, y se hospedó en la propia casa de Felipe Melanchton. Allí llevó a cabo su gran ilusión: La traducción del NT al castellano. Posteriormente en Amberes consiguió imprimir su obra en 1543. Al presentársela al Emperador Carlos V descubrió algo que luego, él mismo relata en sus memorias, que el Emperador, como la mayoría de altos cargos e incluso clérigos de la época carecían de los más elementales conocimientos bíblicos:
… A duras penas pude evitar que se me escaparan algunas palabras más libres que lo que el momento y el lugar requerían, viendo a un príncipe tan grande ignorar totalmente lo que es el Evangelio de Dios, el Nuevo Testamento, las santas letras y la doctrina celestial, y no solamente ignorar eso, sino también poner en tela de juicio la Santa Escritura, la Palabra de Dios. ¡Cosa de lamentar con lágrimas de sangre! **
El final de este episodio es fácil de imaginar, el 13 de diciembre de 1543, Francisco de Enzinas fue encarcelado por orden del Emperador.
Peor suerte corrieron los reformistas que vivían en España, entre mayo de 1559 y diciembre de 1560, hubo cuatro autos de fe en Valladolid y Sevilla, muchos de los condenados terminaron en la hoguera.
Nuestra vivencia del Evangelio, con frecuencia se identifica más con los pequeños grupos de reformadores radicales que surgieron en toda Europa, en torno a los reformadores magisteriales del siglo XVI. Estos grupos fueron perseguidos tanto por católicos como por protestantes por afirmar que la iglesia no debía apoyarse en el poder civil para alcanzar sus objetivos y que la iglesia debía estar formada por personas que libremente optaran por ser discípulos de Jesús, por enseñar que ante Dios somos todos iguales, que la autoridad espiritual se basa en una actitud de servicio, o por renunciar a la violencia para resolver los conflictos.
Desde el siglo XVI hubo pocas oportunidades para que los evangélicos en España pudieran tener libertad de culto, pero aún así nunca han faltado focos reformadores, la mayoría en la clandestinidad hasta poco antes de la llegada de la democracia. Aunque predominó la intolerancia y la persecución, siempre hubo pequeños conatos de libertad religiosa, otras veces simple tolerancia, dependiendo con frecuencia del talante de las autoridades locales y provinciales.
Por poner un ejemplo, en 1836 el inglés Jorge Borrow llegó a Badajoz desde Portugal. Este traductor, viajero y representante de la Sociedad Bíblica Británica realizó parte de su labor evangelística entre el pueblo gitano y tradujo el Evangelio de Lucas al caló para que los gitanos españoles pudieran acceder al texto bíblico en su propia lengua. Sus libros “La Biblia en España” y “Los Gitanos Españoles” donde cuenta sus aventuras y desventuras fueron traducidos al castellano por el presidente Manuel Azaña.
Acercándonos ya a nuestros días:
Muchos de los que hoy formamos esta congregación evangélica nos iniciamos en la fe al final de los años 60 y durante la década del 70, gracias al trabajo de misioneros de diversa procedencia. Aunque nada más sea por darles la honra y el honor que merecen no puedo dejar de nombrarles, por lo menos a los que ya no están con nosotros en Burgos, aunque no pueda extenderme ahora en sus ricas historias personales:
El acuarelista finlandés Benito Manninen y su esposa Rita, el músico uruguayo Luís Alfredo Díaz o los estadounidenses Juan y Bonny Driver, y sobre todo, la familia Jobe. El padre, Roberto, falleció hace ya más de 15 años y sus restos descansan en el cementerio de Burgos, el lugar que tanto amó y donde hizo tantos amigos, Roberto “El Americano” fue un personaje popular y querido en Burgos, y especialmente por sus vecinos en Rubena. Su vida y su mensaje estaban plenamente interrelacionados. Hoy se hubiera sentido muy feliz de estar en este lugar.
He empezado explicando que el edificio es un recurso, más que un templo, y eso tiene que ver también con la diversidad de actividades que aquí se van a desarrollar.
Somos una Iglesia autóctona, intergeneracional, actual, pero a la vez primitiva en la identificación con el cristianismo original, que ha hecho florecer entre nosotros una amplia gama de actividades.
Porque la vida de la iglesia no se centra únicamente en el culto, este va unido a la obra social, el ocio, la cultura… Así que aquí tienen su sede dos de nuestras entidades dedicadas a la cooperación al desarrollo: La Casa Grande (en Benín) y CercÁfrica (en Costa de Marfíl).
ADN es nuestra asociación de jóvenes con el proyecto “El Sitio” que ofrece una alternativa para el ocio y tiempo libre en un entorno sano y seguro. Esta tarde tienen aquí su propia inauguración.
La Asociación Francisco de Enzinas se dedica al área cultural y en este momento promueve las actuaciones del Coro Góspel Soli Deo formado en su mayoría por miembros de diferentes iglesias evangélicas de Burgos.
Desde aquí trabajará el Consejo Provincial de Enseñanza Evangélica que regula la enseñanza de esta materia en la escuela pública.
Sirvan como ejemplo estas actividades de otras muchas que ya se han hecho sitio en este edificio.
Tenemos un estilo de vida y una visión que ofrecer a Burgos, y queremos que se vea, como este edificio. Tenemos una fe respetuosa pero desinhibida, en un ambiente intergeneracional, como en una gran familia… en un espíritu de servicio, porque Jesús no vino a ser servido sino a servir.
Finalizo ya, dando las gracias a todos cuantos habéis hecho posible la realización de este edificio, desde dentro y desde fuera, desde lo público a lo privado. Burgos es hoy vanguardista al contar con un lugar así en una cesión municipal, por nuestra parte tenemos la determinación de sacarle partido.
Muchas gracias por vuestra atención, que Dios os bendiga.
Burgos, 14 de Enero de 2012
*Todas las citas bíblicas están tomadas de la versión “La Palabra” Sociedad Bíblica de España.
**DE ENZINAS, Francisco, Memorias, Obras Clásicas de la Reforma, La Aurora, Buenos Aires, 1960 |